Araya y Paria: el enigma de las penínsulas
octubre 10, 2015
Sucre es un estado de Venezuela con geografía absolutamente
impresionante y privilegiada, se ubica al oriente del país y al parecer todavía
no hemos sabido reconocer su altísimo valor geográfico, turístico y biológico.
Solo imaginen una región que tiene dos penínsulas, dos golfos y un delta.
Increíble.
Pero me concentraré solo en
sus dos penínsulas, las que considero el epicentro del atractivo de Sucre. Lo
que pocas personas saben es que estas hermanas son totalmente diferentes y
están separadas por menos de 90 kilómetros. Araya, ubicada al oeste, es un
misterioso desierto frente al mar. Paria, al este, es una exótica selva
tropical que baila pegado con el Caribe. Pero ¿qué las hace tan diferentes?
El paisaje de Araya
Todo parece ser un juego
perfecto entre el viento y las montañas. Araya con sus serranías bajas no logra
retener a las nubes que viajan cargadas de agua, por lo tanto en Araya llueve
muy poco, la vegetación es escasa y muy xerófila. Las especies que habitan esta
zona han tenido que aprender a sobrevivir con muy poca humedad. Por eso Araya
sorprende con sus paisajes desérticos, sus inmensas salinas y sus colores
opacos.
La selva de Paria
Pero 85 kilómetros al este,
ocurre todo lo contrario, Paria tiene montañas más altas que son capaces de
atrapar a todas las nubes que pasan de largo por Araya. Además, Paria y la Isla
de Trinidad son de los primeros territorios con los que chocan las corrientes
de aire que viene del norte del Caribe y el Atlántico. Esto da como resultado
una extensa selva nublada que recibe gran cantidad de lluvia.
Playa Pui Puy, Paria
Por eso Paria es la gran
costa tropical de Venezuela, donde los árboles de la selva caen a los pies del
mar y los paisajes son de gran belleza. Pero no todo queda ahí. Existen
evidencias científicas de la gran
similitud de las selvas de Paria con los ecosistemas de Guayana y el Amazonas,
pero al estar frente al Caribe, la flora y la fauna se adaptaron a estas
condiciones, dando origen a una gran cantidad de especies endémicas, tal es el
caso de un colibrí que tiene cola con forma de tijera y más grande que todo su
cuerpo. Este colibrí forma, junto a otras especies de plantas, animales e
insectos, un selecto grupo biológico único en el mundo, son especies que solo
habitan en Paria. Lamentablemente esta zona, “protegida” en gran parte con la
figura de Parque Nacional, es uno de los lugares menos estudiados y
documentados de Venezuela, el acceso es complicadísimo. Se estima que buena
parte de las especies que hacen vida en Paria permanecen desconocidas
.
La vista de Araya desde el mar
Pero Araya también tiene su
encanto, las salinas han sido desde siempre un símbolo de la riqueza de esta
península. Hace muchísimos años, cuando la sal era de gran valor en el mundo,
los españoles y holandeses de peleaban por el control de las salinas de Araya,
debido a esto se construyó una gran fortaleza frente a la playa, que luego fue
parcialmente destruida. Hoy en día las ruinas se mantienen y le dan a la costa de Araya un aspecto mágico
y atractivo. A pesar de no contar con un debido mantenimiento, al castillo de
Araya es un lugar que vale la pena conocer. Las salinas son también de gran
interés, caminar sobre ellas es como andar sobre un inmenso valle de cristales
rotos que cambian de color con los rayos solares.
Cómo
llegar y qué conocer
Araya: Hay varias formas de
llegar, la más sencilla y atractiva es
navegar desde Cumaná. En el mismo puerto pueden tomar dos opciones, ambas son
económicas. Al puerto se llega fácilmente en transporte público y carritos por
puesto desde el centro de Cumaná. Los “tapaitos” son pequeñas embarcaciones
techadas que atraviesan el Golfo de Cariaco hasta la población de Manicuare,
desde donde salen los camiones que hacen de transporte público hasta la propia
Araya. Los tapaitos son usados por los habitantes por lo rápido del traslado.
Son calurosos y no se puede disfrutar del paisaje, ya que son totalmente
cerrados. La otra opción, la más turística, es tomar el ferry de la empresa
Naviarca. Puede llevar su vehículo y aunque el viaje es más lento que en los
tapaitos, la vista de los paisajes es asombrosa y se disfruta muchísimo. El
ferry llega directo a la población de Araya. Otra forma de ir es por carretera,
en Cariaco de toma la vía que conduce a Chacopata, por el norte de la
península.
Ruinas del castillo de Araya
En Araya es obligatorio
conocer las ruinas del castillo, ubicadas frente a una playa que lleva su mismo
nombre. La playa es muy azul, poco profunda, con casi nada de oleaje y algo
fría. En general casi todas las playas de la zona son así, ideales para los
niños. Cerca de playa El Castillo hay posadas y restaurantes, aunque las
opciones son pocas. Las zonas urbanas de Araya no tienen ningún atractivo. Muy
cerca se encuentran las salinas, no hay un acceso definido, lo ideal es caminar
por la carretera o detenerse en el vehículo y bajar hasta las salinas por donde
el lodo lo permita.
Salinas de Araya
Al sur de Araya se encuentra
Punta Arenas, una extensa área de playas
muy bonitas con arenas blancas y aguas cristalinas. Desde aquí se puede ver a
lo lejos a la ciudad de Cumaná, del otro lado del golfo. En Punta Arenas viven
muchas familias, hay pocas posadas y ningún tipo locales para comprar comida o
bebidas, hay que llevarlo todo. A este lugar se llega por una carretera
asfaltada que después se vuelve de tierra. Los paisajes y la vegetación son
sorprendentes.
Punta Arenas, Araya
Paria: La forma habitual de
llegar es por carretera, desde Cumaná se toma la vía hacia Carúpano y se bordea
el Golfo de Cariaco. Unos 30 kilómetros después de Carúpano se encuentra Río
Caribe, principal poblado de Paria. Es un lugar estupendo, muy agradable como
la gente que lo habita, hay amplia oferta de hoteles y posadas, para todos los
gustos y presupuestos. Impelable conocer el malecón y el mercado popular justo
a un lado.
Playa Medina, Paria
Desde Río Caribe salen camiones hasta las playas y caseríos de
Paria, tienen horarios y son muy, pero muy pocos al día, es el único transporte
público disponible. Las Playas más famosas y cercanas son Medina y Pui Puy, a
ambas se llega por la misma vía, al final solo las divide una Y: a la derecha
se llega a Playa Medina, y a la izquierda a Pui Puy. Ambas playas son de gran
atractivo y diferentes, Medina es más impactante, pero lo ideal es conocer
ambas.
Muy cerca de Río Caribe, en
el sector Chacaracual, se encuentra la fábrica de Chocolates Paria, vale la
pena conocerla, recorrer el ecomuseo del cacao y comprar los deliciosos
chocolates a buenos precios.
Hacia el poblado de Tunapuy
se encuentra la hacienda Aguasana, donde hay aguas termanles y una posada.
Recomiendo altamente visitar estas aguas termanles, son el relax total.
La costa de Paria
Al este de Paria hay más
lugares a los que se puede llegar por carretera, los de mayor interés turístico
son las playas de Cangua y Querepare, en esta última es donde funciona el
proyecto más importante que trabaja en la conservación de las tortugas marinas,
que llegan cada año a desovar en Paria. Más allá se ubica San Juan de las Galdonas,
desde donde se puede tomar peñeros para llegar a las playas más lejanas de
Paria, en las zonas que no poseen ninguna carretera. Estos traslados son
costosos y complicados, por eso gran parte de la Paria oriental permanece
virgen y desconocida, habitada solo por pescadores y tristemente usada por el
narcotráfico con impunidad descarada y total. Parece que Paria se ha negado con
los años a ser descubierta por completo.
Los árboles de Paria a los pies del mar
El enigma de estas dos
penínsulas seguirá vivo por muchos años, la única forma de comprenderlo es
visitarlas, conocerlas y quererlas.
El oriente de Venezuela desde el espacio
3 comentarios
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ResponderEliminarQuiero conocerlas y esta información ayuda mucho.. Mil gracias
ResponderEliminarQué bueno! esa es la idea
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