Sabores en los Valles Altos de Carabobo
junio 20, 2017
Le
tengo gran cariño a este lugar de mi estado natal, porque desde niño lo visité
con frecuencia, sobre todo en vacaciones cuando siempre me iba de campamento. Después
de mucho tiempo sin volver, fui a recorrerlo un par de veces con mi amiga Linda
Fleitas, para escudriñarlo con ojos de periodista y reseñar nuevos datos.
Texto y fotos: Eduardo Monzón
Chocolate del árbol a la barra
Qué
alegría llegar a la hacienda San Cayetano, el hogar de Chocolates Valle Canoabo, que en poco tiempo ha triunfado
dentro y fuera de Venezuela. Apenas llegamos nos recibieron como familia,
entramos a su pequeña tienda y el aroma a chocolate nos alegró la existencia.
Así comenzó este recorrido para aprender cómo hacen chocolate del árbol a la
barra, con nada más y nada menos que nuestro mejor cacao del mundo
Ojalá puedan visitar este lugar y hacer el recorrido por la hacienda con el señor Luis, el visionario detrás de este proyecto, primero lo entrevisté como una hora, sentados y comiendo chocolate, luego arrancamos a caminar por los sembradíos de cacao.
Me explicó la variedad que tienen y cómo es la cosecha, también me contó su historia de vida, se vino hace muchos años de Chile -aunque él y su cariñosa esposa conservan el acento como si hubiesen llegado ayer- y trabajó por mucho tiempo en la industria del vidrio. Un día leyó que el cacao de Venezuela era el mejor del mundo, esa frase lo llevó a dedicarse a lo que hoy hace. Está convencido de que el "chocoturismo" es una gran oportunidad para Venezuela, está decidido a cambiar la historia de Canoabo a punta de chocolate y turismo. Lo va a lograr, se le nota en cada palabra.
La hacienda se ha convertido en uno de los principales atractivos de la zona, que recibe a cientos de visitantes que acuden a conocer el origen de las barras de chocolate que en 2016 figuraron como una de las mejores del mundo al quedar seleccionadas en el cuadro ganador del concurso “Grand Cru”, en la Feria Internacional Europein-Intersuc, que se realizó en París con la participación de 138 países.
Tienen que abrazar un árbol mijao gigante que está en medio de los sembradíos y tomarse la selfie frente a él, se está convirtiendo en costumbre en la hacienda San Cayetano, hacen falta unas 6 personas para rodearlo completo porque es inmenso, nosotros lo abrazamos pidiendo paz, alegría y prosperidad para Venezuela. Ojalá que todos los que visiten la hacienda lo hagan. No dejen de degustar los distintos tipos de bombones y las barras hechas con 60 y 70% de cacao que venden en su tienda. Instagram: @chocolatecanoabo.
El Estero
Qué
sabroso es comer criollo, disfrutar lo nuestro y saber que tenemos identidad,
de eso se trató nuestra visita a este restaurante. El plato de entrada fue una
sopa que estaba buenísima, con carne, plátano, maíz, ñame, la arepita a un lado
y el limón cortado que nunca le pongo a la sopa. A un lado estaba la jarra de
papelón con limón, de fondo sonaba música llanera de Bejuma y la brisa pegaba
por un lado. El clímax de la euforia llegó cuando nos sirvieron una cachapa gigantesca, con esa
mantequilla derretida, el aroma a maíz y queso.
El Estero es un negocio familiar que abrió hace 7 años y progresivamente fue remodelando sus instalaciones, para el futuro planean convertirse también en una posada. El restaurante está ubicado en la vía Aguirre-Canoabo, muy cerca de la entrada al sector Mocundo, tiene un estacionamiento amplio rodeado de árboles y sus espacios son muy agradables para comer. Fue muy grato conocer a Jenifer, muy amable y conversadora nos contó el empeño que le pone al restaurante. Instagram: @elesterocarneenvara.
El Portachuelo
El
Portachuelo es un parador turístico impelable cuando vayan a los Valles Altos
de Carabobo, está en toda la Y que divide la vía hacia Montalbán y Canoabo.
Aquí pueden comprar artesanía y comer desde tortas hasta empanadas. Ahí conocí
a la señora Adriana, que elabora y vende 22 tipos de licores artesanales, unos
muy originales como cocuy de café y un licor de mastranto, su contacto por si
se quieren echar un palito: 0424-4319552.
Frente al parador turístico se encuentra la imagen de la Inmaculada Concepción, figura religiosa que se convirtió en la patrona de Montalbán luego de ser enviada por el Rey Carlos III en 1736, siguiendo las costumbres de los monarcas españoles. Sus fiestas patronales son celebradas en la zona cada 8 de diciembre.
Frente al parador turístico se encuentra la imagen de la Inmaculada Concepción, figura religiosa que se convirtió en la patrona de Montalbán luego de ser enviada por el Rey Carlos III en 1736, siguiendo las costumbres de los monarcas españoles. Sus fiestas patronales son celebradas en la zona cada 8 de diciembre.
Sushi en Bejuma
Apenas
llegamos a la Hacienla La Calseta nos recibió un paisaje tan bonito que lo que nos
provocó fue vivir en un lugar así, con
chaguaramos altísimos, la grama bien verde, una casa con tejas, chinchorros en
los pasillos, trinitarias a los lados y vista a las montañas de Bejuma.
La extensa hacienda cuenta con varios atractivos, el primero de ellos es un restaurante con una oferta novedosa y fuera de lo común donde el plato principal -contrario a lo que muchos pensarían- es el sushi. El objetivo de crear una propuesta distinta fue logrado con éxito, porque la oferta gastronómica es de primer nivel, comimos mega sabroso, creo que es mejor sushi que he probado, además la decoración del restaurante es muy grata y la atención muy cálida.
En la hacienda hay una posada con varias habitaciones para los que quieran hospedarse un fin de semana, me llamó mucho la atención una gran piscina que llenan con agua de río, por eso luce un llamativo color esmeralda que hace juego con la abundante vegetación que la rodea.
El turismo con propósito es la bandera de la hacienda, cuyas ganancias son invertidas en la casa hogar “El hogar de muchas manos”, en Bejuma, donde atiende a más de 50 niñas y adolescentes. Instagram: @posadarestaurantlacalceta
Pasar por Aguirre
Si
andan por esta zona hagan lo posible por entrar al pueblo de Aguirre, me gusta
mucho el silencio y la tranquilidad de sus calles, siempre llenas de frescura. Hay
que detenerse en la plaza, para admirar
la peculiar arquitectura de su iglesia, muy colorida y vistosa.
Hay un motivo tonto pero muy representativo para que me guste este pueblo: Aguirre es mi apellido materno, así que cuando voy pienso en mi gente y me tomo fotos en el mural con el nombre del lugar para enviarlas al grupo de whatsapp de mi familia, así los que están lejos pueden conectarse un ratico con Venezuela.
Hay un motivo tonto pero muy representativo para que me guste este pueblo: Aguirre es mi apellido materno, así que cuando voy pienso en mi gente y me tomo fotos en el mural con el nombre del lugar para enviarlas al grupo de whatsapp de mi familia, así los que están lejos pueden conectarse un ratico con Venezuela.
Posada Amarama
Ubicada
en Aguirre, esta posada parece un extenso jardín tropical en el que hicieron
discretas habitaciones escondidas entre las plantas y flores. Lo primero que me
enganchó fue su piscina tan azul, con esa vista caribeña en medio de los Valles
Altos de Carabobo. Esta fue una visita muy cómica porque no la teníamos en
agenda, simplemente llegamos, nos dijeron que la dueña no nos podía atender
pero nos dejaron pasear como perro por su casa para conocer todo.
La posada tiene una personalidad muy colorida y bohemia, con mucho silencio para descansar y objetos curiosos dispuestos por cada rincón. En la parte posterior hay una gran fuente con trinitarias a los lados y una plataforma de cemento para pararse sobre el agua. www.amaramaposada.com.ve.
0 comentarios